Lanzas de velocidad

Estuve detrás de la felonía guinda
cayendo como tormenta sobre la pasión,
lanzas de velocidad
pitando de rojo la alcoba escondida
y no sé por dónde iré sentado.

Surge un lamento
a la sombra de la Luna en su vaivén,
fue el pasado
quien llevó lanzas de velocidad
antes que el misterio
pueda ser arena o rosa.

Una irremediable quietud
sucumbía la villa y la aclaración,
dándole fragilidad a las lanzas de velocidad
manteniendo a salvo los recuerdos
de lo que fue derruido
días antes, cuando empezaba la pesadilla.

Aquí, desperté sobre la maleza
y el llano bordeando como serpiente
exclamándome beber un poco de vino,
de inmediato, cada latido se esfumaba
precipitando la lozanía de la percepción.

Silencio guardé
después todo comenzó a cambiar
volvía a ser lo mismo
y las lanzas de velocidad desaparecían
entre las lejanas paredes y tu amor pasajero
porque iba avanzando en contra
revertiendo el sabor del mar del olvido.










Imágenes: Lanzas de Xavier M. - Las lanzas de Poldavo(Alex)/Flickr.com y Bilateral 2 (pintura de Antony Llanos Salomé)

7 comentaron:

Unknown dijo...

Amigo, tienes un espacio interesante y tus versos muestran una pasión propia de tu juventud. Continúa escribiendo con esa entrega. Un fuerte abrazo,
V.

Anónimo dijo...

Que bellas fotos al igual que el poema...

Un abrazo poeta.

Alberto Zambade
El pequeño Dardo
España (Madrid)

Ángel Fondo dijo...

Parece que la velocidad del tiempo tiene lanzas que quiebran amores pasajeros y anuncian el triunfo del olvido.
Tu forma de hacer poesía es difícil de interpretar, espero haber acertado.
Saludos.

Tony dijo...

El poeta: fascinante recorrer muchas veces por tus versos, gracias por la visita y el comentario.
Gracias Alberto Zambade y espero seguir leyendo más leyendas en tu espacio.

Robin: Tal vez se haya hecho difícil, sin embargo, has acertado y sí que lo has hecho bien, has resumido todo el poema con simples palabras. Muchas gracias por la visita y el gran comentario, sirve mucho para los que de deseen saber lo que expreso. Un abrazo fuerte.

Esfinge dijo...

Otro mar... atrás

Anónimo dijo...

A mi me hizo recordar el cuadro La Rendición de Breda o Las Lanzas de Velázquez. Se ven las armas en lontanaza.
¿Has probado con prosa poética?

Gonzalo Del Rosario dijo...

Perderse en el amor es más seguro que encontrarlo.