Ante el pasar de las letras
y la paupérrima soledad
inventada en la desesperación:
Tus manos vienen tibias.
Ante la negrura de las tristezas
y las puertas cerradas
a altos sonidos como temblor:
Tus pies se asoman sigilosos.
Ante la muerte próxima
y los anunciantes a ella
estremecen la desesperación
y…
Tu voz suena como melodía sin fin.
Ante los frascos de cristal
y los sueños hechos pesadillas de cartón
enajenándonos en olvido de locura:
Tu cuerpo se hace real.
Se lo dedico a aquellas noches que también parieron a las fotos, en la madrugada del cielo de Lima, la última fue un juego de flash y coincidió con la forma de un corazón, era eso lo que me anunciaba...
Un buen mal sueño
Hace 14 años.