Ínsula en herrumbre

Por las mañanas finjo despertar con heridas
las que nunca aprendieron a coagular,
incandescente ramo de lucidez.

Giro las almohadas para cambiar mis sueños
evitando la lluvia de granadas de guerra,
el sabor onírico de la derrota.


Dejé al despertador morir en la contienda,
para qué,
sólo anhelo el desenlace del tiempo
en su carrera a la sombra de la adrenalina,
como mi voz ahuyentando rimas.


Y espero al reloj
que nunca llega,
que no desea estar
aquí.
Escondo el rostro, mis pensamientos tejen y destejen,
al final ni la nada se compadece
del hambre voraz del todo.


Anochezco al mediodía
y soy madrugada por las tardes,
las calles me ven vacío y yo a ellas,
faltas siempre tú... en esta forma del mundo.


Por las noches me acuesto junto a la ventana
para esperar el viento,
la compañía gris de la voz embarrotada
por tantos besos ausentes
y lágrimas dulces.


Caída todo

Bajo el mar 
me sujetas fuertemente 
la almohada a la cabeza

Desintegrados completamente
al azar 

o la espera de alma

El disfraz del tiempo
paro cardiaco 

por repentino paroxismo

Abismo a lo desconocido
al no sonido 

soledad y vacío

El nicho de la luna
y de estrellas rotas 

del presente



Papel y reflejo

Papel de muchas formas
o muere en el agua siendo embarcación
o en la intemperie intentando ser un avión


Tira por la borda a la luz
y deja a sus brazos cansados para nadar
Enciende las cenizas por desesperación
necesitado del filo
cuando sólo la luz neón abriga


Reflejo del origami de los gritos
Juntos en el esquina del balcón
y un madeja lunar

Corona angosta en el felino
confundiendo a la vida
con un acto múltiple de ficción



Nada (I)

Nada (I)
Beba y resuelva este confuso remolino de tácitos.
Hágase un sujeto sin verbo mañana sin horizonte.


Emotiva carta en blanco, escrito todo en espera de su ceniza sin haber probado fuego.


Déjese, mézclese con un piano. Haga cada cuerda su crucifixión y no pida sangre si no puede coagular.


A bocajarro aparezca aquí o sea mi eterna ficción de los laberintos del sueño, porque no hay más noches, ni tardes.


Pídale fin a la brújula
y detenga el devenir de palabras sin resultado de significante.





Acuarela azul


...y tú me diste alas,
gravedad



para dormir a la lucidez
que galopaba mis dedos
y ponía en frenesí
mi aliento encarcelado



¡Viva la falta de cordura!
ingente y sin mesura



Acuarela urgida de llantos
para diluir sus colores
y darlos extasiados

por ti, corazón enmarañado.


Todas estas noches



Una taza fría
del café de tus recuerdos
a esta cama ancha


Un poco de carbón
para el lápiz silencioso
que resbala en la humedad
del papel


Todas estas noches


He levitado junto al vapor
de los sudores cansados
y los movimientos tímidos

Me he pintado de negro
las manos
para ser iluminados por tus ojos

Todas estas noches

Tibias

Plomas

El Eterno / Cuerpos extraños / Calaminas rotas

EL ETERNO

Almorcé
un poco de frío
cuando desconocí de humedades
y perdieron fuerza
las falanges
mientras jadeaban los ajenos

Pude haber partido
o haber sido escupido
a falta de un pasado inmóvil
que como larva se mueve
noche tras noche

Y he dejado la jauría humana
atrás,
ellos matan y no muerden,
son como soy,
vacíos abrigados
entre apretones de brazos
alternos y eternos
(08/09/2011)


Cuerpos extraños

Soy la manía desesperada
de mis dedos quebrados
Y el eco
de tu silencio cansino

Eres la evasión al hambre
y del pueblo que agoniza
porque ya no pueden caber
más

Somos cuerpos extraños
de paladares adormecidos
y memorias compartidas
que al ser arrastrados por el viento
terminamos mezclados con el barro
bajo la huella de todos los zapatos
(11/09/2011)


Calaminas rotas

Cruje el cielo
Todas las tardes

Las palabras se han enredado
Y no pueden ni resbalar

En el precipicio de las promesas
Las bocas más palpitantes sucumben

Hijos, los rayos más esperados,
Crean zurcos en la piel

Las tripas han de caer al piso
O las comen, o mueren sin haber conocido

Y no quedan más que suspiros
De un empañado futuro
Que dejaron las calaminas rotas
(30/09/2011)

Quiero

Quiero empezar
Pero siento que ni he terminado

Quiero correr
 Pero siento que me ha mordido un perro

Quiero hablar
Pero siento que el silencio es más fuerte

Quiero amar
Pero siento que no podré hacerlo

Quiero olvidar
Pero siento que envejecido como Funes 

Quiero beber
Pero siento que la sed ha consumido mi sangre

Quiero escribir
Pero siento que mis dedos se han quebrado

Quiero terminar
Pero siento que ni he empezado

Foto: Manos #2 por Aspirino.

30 de agosto

Por qué me duelen aún
los 30 de agosto
provocan más eco que una hoja seca
cuando no cae
roe mis huesos y desaparecen
mis pasos
humedece las paredes
derruidas a medias
opaca el insomnio
me deja a solas por la tarde
mientras la noche se alista
al borde de las pasiones adversas
día y noche
tarde y noche
noche y noche
Esperaré
la mañana
aquella
cuando
la oscuridad me aborrezca
y la claridad clave
el piquete letal
que advierte
todo ha culminado


El día en un sueño

La tarde caía
ía
ía
sin
Su corazón
sangraba
y los ocasos camuflaron
a los huesos amantes
antes
es
Las ventanas alumbraban como luciérnagas
a las llagas
y las heridas se olvidaban
daban
al
Más que una sonrisa inventada a medias
el despido
llena de amargura
ra ra ra ra rra rra
a los que quedamos
tan vacíos como
la oquedad del silencio
...
...
...

Sólo cenizas

Mis sueños se han sumergido en un holocausto medio extraño
y no sé cuántas veces haya cumplido años
o haya amado a un vano suspiro de los cuerpos.

Quise detenerme a escalar entre arruga y arruga,
pero resbalé con el sudor de las noches frías.

Tuve miedo,tanto que quise dejar de escribir
para reservar ese impulso ciego
cuando me vea abrasado por el fuego fatuo.
Aquel día, no recuerdo cuál, sólo cenizas dejé.

La insurreción de la saliva

Los hálitos yacen esparcidos sobre la superficie yerma
Mientras debajo corro en la sudorosa piel desesperada
/Las horas vierten palabras afiladas/
Amanecerá pronto
(…)
Amanecerá muy pronto

Otrora de los cabellos despegan cuervos desplumados
Como huyendo de la cárcel de los epítetos
Y las oquedades húmedas de la razón
Surge así
ÉL

El delirio del delito pasional
Envuelto en la efervescencia de las carnes separadas

Por encima del vuelo de Íkarus

Insurrección de la saliva
Va
Más
Allá

Paladar del ego hambriento:
La madrugada anegada que cubre con la capa raída
Al receptor de neófitos
En versos
/Ver
Esos/

Esos poemas errantes
Por el camino que dejó
Una supernova herida

Regicidio

La batalla de San Romano de Paolo Uccello

Techos de lluvia reservada,
llamando a la calamidad
todas las veces que la corona
empalidezca de versos
y no hayan siervos para mandar.

Despidos a la altura de la gran torre
entre pañuelos cruentos
y escudos penetrados
por los subterfugios del futuro.

Todo ha de verse resquebrajado
como las sombras rotas
bajo la líne lucífera de mi historia
que se apaga.

Que se apaga.

Que se apaga.

Que se apaga
al final de interregno.

Rey

Vuestro reino
en querella entra
al extinguirse
el clamor del deseo
que en algún momento
fue la negrura del alma.


Retorna y retorna.




Mientras zancadillas
se escuchan por los pasillos
pidiéndole pavor
a las almas
en el que usted duerme
como levadura de madrugada.




Fuego y menos fuego.




Pesados trajes
al hombro de los aldeanos
como cintas acuñadas
a la dirección tomada
le da al cuello
forma de muerte.

Póquer

Es abierto
el mazo
y las cartas
comenzaron a parlotear…

¿Cómo luchar contra la abolición?


¿Cómo derribar el castillo?


¿Cómo fundir las joyas?

Paso al póquer
y que gane el que llegue
a las orillas
para ver caer la bandera
sobre escudos mojados.

Contra la caballería
dentro de las cadenas
aunque quede una sola pregunta:
¿adónde se fue el rey?
Foto: The King of Hearts - a la Warhol de Revo_1599

La corona y el tiempo

Marcas de dientes dorados
acompañan a las alas
sobre sus hombros agrietados.

La levadura arremolinada
señala el signo que le dejó
el pavor de las coronas.

Y por el camino
pequeñas rayas escarlata
bañan su lamento
al trono perdido.

Mientras por detrás

el tropel renuente
guijarros lanza
para combatirle al dolor.

Pero la capa ha de gastarse

si una reina ha sembrado en él
el olvido de ser.


¿Por qué dejar el torreón?

Allá, el alba para recoger huesos,
beber de la tierra
y comer del mar
aunque los siervos no perdonen.

Y los feudos se levanten
con espejos y aviones explosivos
a la par de las divisiones
y sus pies cansados.
Foto: King of sorrow de Sand Man / Flickr.com

Efebo Rey silente

Cuáles sendas abriría
para apaciguar la brava
lascividad del mecanismo
furtivo.

Si un retén pigmentado
con las fiebres del tiempo
se transforma en la gran muralla
de cantos pensantes
y recuerdos ominosos.

Y como gotas parlantes, a los veinte,
navegando en garúa bergante
voy hacia el torreón
del efebo Rey silente.
Foto: two boys, crown, new orleans, 2001 de Saint Roch / Flickr.com

InterMedio Siete

Cuando estuve imaginando la estación séptima de esta bitácora, pensé en "delta"... -sólo es el título de un cuaderno más-, en especial ése porque creo que esa disparatada catársis multicolor se vio mejor impreganada ahí. Así que ahí les dejo con el experimento visual.

Di... ez

Figura…

El llanto desciende
como nieve tímida
sobre el cuerpo de las acuarelas
y en ellas
los colores se disuelven
llevados por el implacable viento
del destino o del tiempo
y… una figura
al cerrar los ojos
surge
aplacando los sueños
sujetos a los pies fríos
durante todas las mañanas
que se solía navegar en contra.
Y el terminar...

Nu.eVe

Las espaldas germanas
Cuánto valdría
obtener un pergamino
sedoso
para llevarme una falda
a la cintura ensangrentada
si cuando quise derruir
un muro de misiles
caí a una gran zanja
sólo vista a través de la pólvora
que algún día el cloro
habrá de dispersar
como los huesos
formando pirámides
y sus lágrimas hayan
inundado el Mar Negro.
Centella del occidente,
impulsada por las rupias
o esterlinas disfrazadas...
cesen, cesen, cesen
antes que la inminencia
atrape a Edipo
a las espadas germanas.
Foto: IMG_4798 de valberto brasil / Flickr.com